lunes, 7 de julio de 2014

El tiempo que me debo

Cada vez es menos el tiempo que le debo a mis sueños, y a los
tuyos también, el futuro que ayer hipotequé solo me trajo los
restos de un naufragio olvidado en la basura, las mismas dudas,
los mismos fangos, compañeros de noches inciertas en tabernas
de ningún puerto, los mismos destrozos y a pesar de todo, la vida
más que siempre me compensa.

A dos cuerpos de distancia siempre hay alguien que me sorprende
y me emborracha con la frescura de otro invierno nuevo para mi.

Una nueva ilusión me hará volver al camino que dejé, y despegaré
mis pies del destino, y a la quimera la compraré billete sin vuelta
hacia mi próxima tempestad, se despejará  el horizonte y te cantaré
ahora que aún no eres mía, y le pondré nombre a tus besos color a
tus mejillas, y dibujaré mil abrazos en algún rincón.

Ojalá que alguien espere en mi próxima canción, cada vez es menos
el tiempo que me falta, es menos cada vez el tiempo que me debo.

martes, 6 de mayo de 2014

No te escondas hoy

No te escondas hoy, porque te buscaré en cualquier parte,
en aquella tarde en que nos quedaron sonrisas pendientes,
en los tiempos de tempestad que no prendieron palabras
sino silencios, en las calles que perjuramos tantas veces,
también en los detalles guardados en recuerdos olvidados.

No te escondas hoy, porque te buscaré en los abrazos de
otros, en el ayer cuando aún eras mía, en tu desnudez en
la cocina, o entre las cinco esquinas de aquella cama, en los
hoteles de primavera, en el olor a madera en aquel bosque
de chatarra, en la penúltima parada de nuestra estación.

No te escondas hoy, porque te buscaré en los desiertos
del alma donde la calma me volvió loco, en los pozos
sin fondo, en los desvelos de días trasnochados, en los
últimos versos de aquel verano, en las noches sin tiempo,
en los placeres de aquella apuesta certera y suicida.

No te escondas hoy, porque te necesito mas que siempre,
de frente solo aquel camino donde nunca te encontré, no
te escondas hoy en el ayer, donde jamás fuiste mía cuando
me asfixiaba en el fango. El lado de tu cama que aún sigue
vacío ahora niega mis vicios, ahora perfila tus trazos.

No te escondas hoy, en el  pasado.

martes, 18 de marzo de 2014

Regresando

Me duelen los pensamientos, se agolpan, me
desbordan y no se como amarrarlos, se expresan
a diario en folios en blanco que niegan lo que
escribo. Escucho lo que el silencio me calla al oído.

Me serena el tiempo cuando pasa tan despacio,
que frena la arena de aquel reloj agonizando. Me
siento en paz quiero decir. La sombra de mi mano
crea figuras ajenas, que me recuerdan a alguien.

Me enloquece sentirme de nadie, y me desborda
el invierno que no ha huido, esta inquieta quietud.
Me atormenta el silbido fuerte de aquel silbato.
Vuelo cada noche y al siguiente anochecer.

Me atrae éste mundo al revés, la ignorancia de
mis labios, los finales descifrados, el borde en
los abismos, el motivo de mis retrasos, y los mil
abrazos por descubrir, los principios sin predecir.

Me entristece tanto que a veces, cuando espero
desespero a pesar de todo. No caducará este lloro
a finales de Abril, ataré mis enredos en otoño.
Cerraré este diario sólo, al verme de regreso en mi.

domingo, 23 de febrero de 2014

El próximo día 13 de Marzo, si andáis por Madrid, os esperamos mis canciones y yo, para deciros y contaros a través de ellas, cuanto os necesito.

Besos y abrazos

PD......." No hubo esperanza que dejara para después, ni oscuridad en ti que no cambiara para siempre mi vida "

miércoles, 19 de febrero de 2014

La puerta de mi esperanza

Calle abajo me topé con ese imposible que fuiste, y
aquel delirio que siempre me negaste rescató de mi
pasado nuestro olvido, pude vernos en aquel patio
de colegio jurando promesas y pactando destinos,
aquellos besos que imaginamos encontraron otros
labios que no fueron los míos.

Me ausenté del paso y del tiempo, y recostado en
tu portal te esperé con fe, pero me pudo tu ausencia
y me alivié preguntando por ti a la primera mujer
que abrió la puerta de mi esperanza.

Ya nadie te recordaba, han pasado demasiados
eneros, mas yo regresé lleno de nosotros.

jueves, 23 de enero de 2014

Nuestra frialdad

No se si te mereces mi indecisión, ni tan siquiera se,
si podré vivir sin tí el resto de mis andares. No me
quedan telares que calmen mi ansiedad, ni sueños
para soñar. La vida tiene las respuestas condenadas.

Alguna vez imagino tu voz bajo las sábanas, y
entonces los infiernos me saben a gloria, pero esta
historia me negó el mejor de los finales, me aferro
a las calles por donde nunca paseamos, y te siento.

Hoy me pierdo entre el asfalto y el cemento, y ya
no busco en las esquinas el perfil de tu sombra.
Peor saber que tus labios ya no me nombran, que
nuestra frialdad encontró abrigo en otras camas.

Ya no extraño las mañanas robadas a la vida eterna,
pero tampoco será fácil sobrevivir sin ellas, ser feliz
exige algo más. La ausencia y los deseos no ayudan
a olvidar. Los lunes, mi tristeza se dejó de perfumar.